Personas que estén atravesando situaciones difíciles, tales como duelos, cambios profundos, separaciones.
Personas que estén deseando hacer un cambio, que no están satisfechas con cómo se están desarrollando sus expectativas y sus deseos.
Personas que creen que pueden sentirse mejor si aprenden a conocerse y a conocer qué les pasa ante determinadas situaciones que suelen repetirse, y que les cuesta resolver.
Personas que están involucradas en proyectos o trabajos de alta exigencia y que les cuesta lograr un equilibrio en sus emociones para hacer más compatible la vida laboral y afectiva.
Personas dispuestas a encarar nuevos desafíos y que desean ser acompañados en el proceso para lograr una mejor adaptación.
Personas que necesitan orientación como madres o padres, sin importar la edad de los hijos o en procesos familiares de diferente índole.
Personas que están en un proceso de emigración o relocación laboral. En este caso también es posible asesorar a todo o parte del grupo familiar.
